Más de 50 soldados e insurgentes murieron en Siria en combates cerca de una colina en la provincia de Latakia, feudo del clan del presidente Bashar al Asad, informó este jueves una ONG.

La batalla entre las fuerzas del régimen y los combatientes de Al Qaeda, con el apoyo de otros grupos islamistas armados, tuvo lugar en el pueblo de Durine, cerca de la localidad de Salma, principal feudo rebelde de la región de Jabal al Akrad. Durine, que estaba en manos rebeldes, fue recuperada el viernes por fuerzas leales al régimen antes de que el Frente Al Nusra, la rama siria de Al Qaeda, volviera a atacarla el miércoles.

"Los enfrentamientos del miércoles han dejado 50 muertos en ambos bandos. Hay muchas bajas porque los combatientes están cara a cara", dijo a la AFP Rami Abdel Rahman, el director del Observatorio Sirio por los Derechos Humanos (OSDH). "Tras los combates, que duraron hasta la una de la madrugada, Al Nusra logró retomar partes del pueblo, pero el régimen sigue controlando la colina encima de Salma", indicó.

La región montañosa de Jabal al Akrad es el principal feudo de los rebeldes en la provincia costera de Latakia, región de origen del clan de Asad. Se trata de uno de los múltiples frentes de la guerra que empezó hace cuatro años en Siria y que ha dejado más de 210.000 muertos, según el OSDH.