Con este triunfo Barcelona aún tiene aspiraciones de mantener la categoría y no descender a la serie B, como en las últimas fechas estaba destinado, pues con garra y pundonor a lo “Barcelona”, logra mantenerse aún con expectativas y deberá visitar a la Liga de Quito, su siguiente rival, para después recibir a la Liga de Portoviejo en el Estadio Monumental, le esperan dos verdaderas finales.

Lo conseguido por José Luis Perlaza se convierte casi en una hazaña, ya que con mucho coraje sube al corazón del área a cabecear, al mejor y más puro estilo de un 9 neto, para lograr este luchado triunfo, ante un rival que no le regaló nada.

Eso le permitió sumar 38 puntos en la tabla de posiciones del campeonato de fútbol y dejar momentáneamente el último lugar en el tablero, por el gol diferencia de menos 2.

Gritos, baile y llanto se miró en los seguidores de los toreros, mientras que los hinchas de Macará dejaron de alentar a su equipo y abandonaron los graderíos. Es la segunda ocasión que en estas circunstancias Barcelona, en peligro del descenso, logra una victoria frente al Ídolo de Ambato.

El duelo se inició con un Barcelona lanzado al ataque, donde Narciso Mina y el paraguayo Juan Samudio, en los primeros ocho minutos llegaron con claridad hasta el arco de los celestes. Samudio con un remate de 30 metros intentó abrir el marcador. Sin embargo, el guardameta Molina acalló el grito de los toreros. A minuto seguido Mina nuevamente frente al arquero volvió a fallar.

En la primera parte Mina se perdió tres ocasiones claras de gol. Esto ayudó a los jugadores de Macará, ellos comenzaron a llegar con claridad hacia el arco defendido por Máximo Banguera. De los pies de Gabriel Fernández el equipo ambateño causó peligro, pero Juan Carlos Ferreira no encontró la fórmula para esquivar a Perlaza, que durante el partido le borró del campo de juego.

En la segunda parte el técnico de Macará Víctor Marchesini sacó a Augusto Porozo y colocó a Mellintong Guerreo. Esto no le dio resultado, porque Barcelona adelantó sus líneas en busca del gol de la victoria. También Juan Manuel Llop realizó una variante, puso en la cancha a Raúl Román por Micke Rodríguez, eso le dio mayor fuerza, en el ataque.

A los 66’ una contragolpe de Enrique Gámez, quien habilitó a Ferreira, este ingresó al área y con un remate cruzado marcaba el 1 a 0. Pese a la estocada, los toreros no bajaron los brazos, Samudio comenzó a causar estragos en la defensa de Macará.

Con el apoyo de Matías Loyola, logró llegar al empate. Y precisamente a los 70’ a través de un tiro de esquina, el paraguayo de un frentazo puso el empate transitorio.

Luego los celestes replegaron sus líneas y Barcelona comenzó a dominar en el partido. Cuando todos esperaban que el cotejo termine 1 a 1, apareció el fantasma Perlaza y de un cabezazo logró el tanto de la victoria, que mantiene con vida a Barcelona, en su lucha por permanecer en la categoría "A" del fútbol ecuatoriano.