La Comisión Europea da un toque de atención a España. "La recomendación (propuesta por la Comisión y adoptada por los Veintisiete) dice claramente que dado que la transmisión y riesgo es similar para los viajes domésticos y los transfronterizos, los Estados miembro deberían asegurar coherencia entre las medidas aplicadas a los dos tipos de viaje", han explicado este lunes desde el Ejecutivo comunitario, al mismo tiempo que han pedido "coherencia" con las restricciones, teniendo en cuenta que España restringe la movilidad entre comunidades autónomas pero permite la llegada de turistas. Eso sí, el portavoz Christophe Wigand no quiso hacer comentarios "específicos" al respecto.

La idea que plantea la Comisión es que las restricciones sean similares, independientemente de si los viajes son interiores o transfronterizos. La libertad de circulación dentro del espacio sin fronteras Schengen es un derecho fundamental de los europeos sobre el que tiene competencias la Unión Europea, no así sobre las medidas que cada país decida adoptar dentro de su territorio para contener la pandemia, ha indicado el portavoz.

Esta situación nace de la polémica en España por el hecho de que el Gobierno mantenga, junto con las comunidades autónomas, las restricciones a la movilidad de cara a controlar el virus en Semana Santa y, en cambio, puedan llegar turistas desde distintos puntos de Europa con destino sobre todo en Baleares y en Canarias.

Desde la Comisión Europea el enfoque siempre ha sido el mismo: que las medidas se apliquen por regiones y no por Estado miembro, pero al mismo tiempo pide que haya coordinación entre los países para adoptar las restricciones. Por ejemplo, ha cargado contra Alemania o Bélgica por prohibir los viajes no esenciales fuera de sus fronteras.